Regularmente, en Cubas llevamos a cabo tratamientos de endoterapia en los pinos municipales para reducir la presencia de la procesionaria.
Sin embargo, como en cualquier control biológico, ningún método es efectivo al 100%. Por eso, siempre es necesario vigilar y actuar, retirando las bolsas que puedan aparecer en aquellos árboles donde el tratamiento no ha dado los resultados esperados.
Si algún vecino detecta orugas en pinos del municipio, puede avisar al Ayuntamiento y se actuará a la mayor brevedad posible para retirarlas.
Recordamos también que los propietarios de terrenos privados con pinos deben encargarse del tratamiento y mantenimiento de sus propios árboles.
Para los casos en los que aparecen orugas, estamos instalando trampas específicas PROKITCOL-10PROCEREX, un sistema eficaz que interrumpe el descenso de la procesionaria y permite su captura sin el uso de productos químicos. El mecanismo es sencillo pero efectivo:
Se coloca un collar alrededor del tronco, que impide el paso de las orugas hacia el suelo.
Las orugas descienden siguiendo su instinto, pero quedan atrapadas en la bolsa colectora.
Se retiran de forma segura, evitando que sigan propagándose y reduciendo los riesgos para personas y animales.
Dicho esto, conviene recordar que la procesionaria no es un enemigo que deba ser exterminado sin más. Forma parte del ecosistema y es el alimento de numerosas aves e insectos. Nuestro trabajo no es erradicarla por completo, sino mantener un equilibrio que evite riesgos en zonas urbanas y garantice la convivencia con el entorno natural.
Si ves bolsas de procesionaria, avísanos.
Controlamos, actuamos y cuidamos de nuestros árboles con responsabilidad.
